Impresión tradicional que rinde homenaje a la fugacidad de la naturaleza japonesa: Los arces mama de Hiroshige y el puente Tsugihashi

"Arce en Mama, el santuario Tekona y el puente Tsugihashi" (título original: 真間の紅葉手古那の社継はし) es un grabado en madera del pintor e ilustrador japonés Utagawa Hiroshige (1797-1858) producido en enero de 1857.

Los troncos de dos majestuosos arces enmarcan la imagen; sus ramas entrelazadas crean una sinfonía de hojas en otoño, que exhiben distintivas tonalidades rojizas y negruzcas gracias a una variación química en los pigmentos. A lo largo del río Edo-gawa, al este de Edo, los habitantes de Mama pasean, atraídos por la belleza de los arces en esta época del año. En esta zona se encuentra el templo budista Guhō-ji, donde hay un santuario dedicado a Tekona, una campesina de gran belleza que, según la leyenda recogida en el famoso Man'yoshu («Colección de las Diez Mil Hojas») del siglo VIII, se arrojó al río para escapar de los pretendientes que le amargaban la vida. Fundado en 1501, este templo ofrece a los fieles la oportunidad de orar por un parto seguro o por la protección contra la varicela. A la izquierda de la lámina, el templo se distingue por su tejado de pronunciada pendiente, precedido por un arco torii. El puente Tsugihashi ("puente largo"), en el centro de la imagen, también evoca esta leyenda: otra antología poética menciona a un pretendiente de Tekona que lamenta no poder cruzar el puente de noche para reunirse con su amada. La composición, marcada por las hojas en primer plano y la suave luz del atardecer, confiere una atmósfera lírica a esta escena donde la leyenda de Tekona cobra vida.